Está claro que el vino es para disfrutarlo, y esa ha sido la principal motivación de la centenaria bodega Delgado Zuleta para lanzar al mercado LOLA, un vino rosado diferente, cuya única norma es la de pasarlo bien con una copa, o un vaso, en la mano.
El vino nace fruto de la colaboración de la bodega sanluqueña con Bodegas Aragonesas, la reconocida casa de donde han salido ya grandes éxitos enológicos como Coto de Hayas, Fagus o Garnacha Centenaria. Según el director comercial de Delgado Zuleta, José Federico Carvajal, “LOLA es un proyecto de corazón aragonés pero de alma andaluza, porque si bien es cierto que el vino proviene de viñedos de la D.O. Campo de Borja, está concebido desde nuestra perspectiva, que no es otra que la de ofrecer al mercado un vino alternativo, fresco y transgresor”.
LOLA es un proyecto enfocado a un público joven, que se relaciona con el vino de manera más informal, sin normas ni reglas y que quiere disfrutarlo cuando quiera y como quiera. Por ello, desde la bodega animan a que el consumo tradicional en copa, también se combine con otras alternativas, como en vaso ancho con hielo y pajita o en chupitos en ambiente de noche.
Esta apariencia informal, puntualizan desde la bodega, no está reñida con la calidad del vino. LOLA es un rosado de garnacha 100%, de viñedos ubicados en parcelas de más de 30 años de antigüedad y con una altitud por encima de los 600 metros. Se vendimia exclusivamente de noche, para obtener un vino de color rosa palo con atractivas tonalidades salmón. Sus aromas son sutiles y delicados de alta intensidad, que recuerdan a frutas frescas tropicales combinadas con un elegante aroma de pétalos de rosa. En boca, destaca su volumen y recuerdo a fruta roja fresca, sutil, armonioso, fresco y con una agradable sensación sedosa y persistente al final.