En pleno debate sobre la implantación de medidas que favorezcan un modelo económico más sostenible, Leche Celta renueva sus principales gamas de producto con un nuevo envase más respetuoso con el entorno.
Elaborado hasta en un 89% de materias primas procedentes de fuentes renovables, el envase está fabricado con cartón certificado FSC®, tiene la máxima certificación de renovabilidad, es reciclable y utiliza plástico de origen vegetal, a partir de caña de azúcar, con una huella de carbono de hasta un 21% inferior a la anterior versión de plástico de origen fósil.
Este novedoso envase también ha sido elegido para el relanzamiento de sus gamas Sin Lactosa y Ecológica, lo que supone aportar un valor añadido en materia medioambiental a estos productos, que a su vez cuentan con el certificado AENOR en bienestar animal, garantizando los principios de buena alimentación, buena salud, buen alojamiento y un comportamiento adecuado.
Con esta reconversión, Leche Celta reafirma su capacidad para adaptarse a los nuevos cambios y necesidades presentes en el sector de la alimentación.
Para más información: www.lechecelta.com