- Es el primer vino de la línea ecológica de la bodega sanluqueña, un Pedro Ximénez, calificado como Vino de Jerez.
- Jopo de Lobo se suma a la familia con Sábalo, Patinegro y Tamarix. En esta ocasión, se ha querido destacar esta especie halófila y vulnerable que aparece actualmente en el Libro Rojo de la Flora Amenazada de Andalucía.
La gama de vinos ecológicos de Bodegas Barbadillo, ‘Cielo, Tierra y Mar’ continúa creciendo. Con ‘Jopo de Lobo’, un Pedro Ximénez, se inicia la línea ecológica de Jereces, ya que, hasta ahora, esta gama contaba con dos vinos blancos –‘Sábalo’ y ‘Patinegro’– y un Orange Wine, ‘Tamarix’.
‘Jopo de Lobo’ es un vino que procede de una vendimia manual cuyas uvas se someten durante veinte días a la exposición solar, mediante la técnica conocida en el Marco de Jopo_de_Lobo 75clJerez como asoleo, lo que se traduce en una pasificación lenta y progresiva. Se estima que, de cada tonelada de uva fresca, se obtienen solo unos 200 litros de vino de pasas. A partir de ahí, ‘Jopo de Lobo’ se encabeza con alcohol vínico hasta los 15,5% vol. y envejece tres años en botas de roble americano por el tradicional método de criaderas y soleras en crianza oxidativa.
Se trata de un vino de color caoba con sutiles reflejos yodados; en nariz dominan las notas de pasas, de avellana, tofe, ciruelas, chocolate y maderas nobles. En boca es untuoso y suave al paladar, con un largo postgusto en el que predominan la uva pasa y los torrefactos de la madera. ‘Jopo de Lobo’ es un vino vigoroso y equilibrado, que marida perfectamente con postres a base de chocolate y helados, pero también puede ser un estupendo aperitivo en maridaje con quesos fuertes y foie. En la cocina tiene muchas posibilidades, tanto para la elaboración de postres como de estofados agridulces.
Barbadillo amplía su gama ecológica ‘Cielo, Tierra y Mar’
Todo esto es ‘Jopo de Lobo’, por supuesto, pero es mucho más: es la nueva apuesta de la línea de vinos ecológicos ‘Cielo, Tierra y Mar’, una gama con la que Barbadillo, una bodega familiar con más de 200 años de historia en Sanlúcar de Barrameda, quiere llamar la atención sobre la preservación del medio ambiente y la naturaleza de la Costa de Cádiz, un asunto con el que la casa se siente muy implicada. Se trata de elaborar unos vinos exquisitos que, a la vez, aporten en el consumidor conocimiento y concienciación sobre la zona tan especial de la que provienen y la necesidad de conservarla.
‘Sábalo’ inauguró la gama, seguido de ‘Patinegro’ y ‘Tamarix’. Y ahora llega ‘Jopo de Lobo’, la cuarta marca de la línea ecológica de Bodegas Barbadillo y el primer vino de la línea calificado como Vino de Jerez.
Protección de especies en peligro de extinción
Si ‘Sábalo’ -un pez que ya no se encuentra en los ríos Guadalquivir y Guadalete- representó el agua; ‘Patinegro’ puso el foco en el chorlitejo patinegro, un ave en peligro de extinción con la que Barbadillo se ha implicado aún más, colaborando en un proyecto de la Universidad de Cádiz y Parques Naturales, en el que se han delimitado áreas para su preservación. ‘Tamarix’ significó la primera entrega acerca de la tierra, ya que se trata de una planta que tiene gran valor en la fijación de dunas, mientras que Jopo de Lobo es una planta perenne que vive en hábitats salinos y que actualmente está en peligro de extinción en la costa gaditana.
‘Jopo de Lobo’ depende de otras especies halófilas porque no produce clorofila y aparece como ‘vulnerable’ en el Libro Rojo de la Flora Amenazada de Andalucía. Se trata de una planta que los seres humanos conocen y utilizan desde hace miles de años, ya que se la atribuyen determinadas propiedades curativas e incluso mágicas. No obstante, en Andalucía está prohibida su recolección para evitar precisamente que desaparezca.
Bodegas Barbadillo espera seguir completando ‘Cielo, Tierra y Mar’ con nuevos lanzamientos antes de fin de año, en que está previsto el lanzamiento de su primera Manzanilla ecológica y también un vino tinto de estas características.
Como es habitual, para la etiqueta de ‘Jopo de Lobo’ se ha contado con la colaboración de la fotógrafa e ilustradora Montse Mármol y la creativa Carina Garrido, que vienen contribuyendo con la imagen de los vinos ecológicos de Barbadillo desde su inicio.