Mastinell se quita el sombrero en la presentación de su primer cava monovarietal de Chardonnay: Chapó!, un Reserva que se viste con un aire original, moderno y atrevido.
Elaborado con una crianza desde 36 meses, este cava monovarietal blanco se lanza como un Reserva, dado a su frescura; aunque cumple con todos los requisitos del Consejo Regulador de la D.O. Cava para ser un Gran Reserva. Así, el cava más atrevido de la bodega Mastinell pretende ser un guiño, tal y como su nombre indica, a las buenas prácticas y al compromiso por una producción excelente. Además, Chapo! se presenta con una nueva línea gráfica muy moderna y actual con la intención rejuvenecer la bodega.
“Con el lanzamiento de este nuevo cava queremos conquistar al nuevo consumidor de vinos y cavas, un público joven que valora las tradiciones y los productos de la tierra.” explica la Directora General de Cava & Hotel Mastinell, Olivia Valderrama. Mastinell ha procurado en su evolución una reconversión de todos sus viñedos, apostando por una agricultura sostenible con una equilibrada combinación de tecnología y políticas basadas en el máximo respeto de la tierra. Cabe destacar que, la bodega está integrada en Cava & Hotel Mastinell, formado además por un hotel de cinco estrellas y un exclusivo restaurante, el Espacio Gastronómico En Rima.
Chapó! nace 100% de las uvas Chardonnay cultivadas en viñedos de la propia bodega, de modo que se ha controlado todo el ciclo de vida de las viñas para crear un cava con personalidad propia. En Mastinell la vendimia se realiza a mano, seleccionando cuidadosamente lo mejores granos de esta preciada variedad, así pues este monovarietal es fruto de un entorno privilegiado y del mimo y la dedicación de una familia, desde el terroir hasta la botella.
El resultado tras una crianza en rima es, de todos los cavas blancos de Mastinell, el más afrutado. Chapó!, a diferencia de sus hermanos de bodega que dan más énfasis a los aromas de crianza, aporta aromas a frutas como el mango, la papaya, los lichis, el melocotón y la piña.
Es un cava de color pálido, muestra que no se ha oxidado durante los años de crianza, delicado en boca y con un equilibrio perfecto entre estructura y acidez. Presenta unas delicadas burbujas muy definidas –perlage- pero agradables al paladar que aportan una sensación de moussage envolvente. En nariz, Chapó! sorprende con notas propias de la fruta tropical acompañadas con notas de crianza como aromas de fina pastelería.
El primer Reserva monovarietal de Chardonnay, es ideal para tomar a cualquier hora y, marida a la perfección con los entrantes, arroces, verduras y pescados blancos, así como también con cualquier plato elaborado con pasta de hojaldre o salsas suaves.