La calidad suiza unida a la competencia en hierbas tiene nombre propio: RICOLA. Sus especialidades de gran calidad, son fabricadas con hierbas cultivadas en las montañas cantonesas y bajo una estrategia rigurosamente focalizada a la sostenibilidad.
Por su formulación a base de hierbas, Ricola está en el “top of mind” de los consumidores en asociación directa al invierno y a un efecto balsámico.
Si bien este hecho es incuestionable, la gama Ricola incluye también excelentes caramelos y perlas para refrescar la garganta también en verano.
La esencia natural de los productos Ricola surge de la mezcla de pimpinela, flores de saúco, verónica, menta, salvia, malvavisco, tomillo, pie de león, marrubio, llantén, flores de primavera, milenrama y malva. Estas son las 13 hierbas suizas presentes en una composición que según el sabor se le añade una catorceava o se potencia más alguna hierba ya presente.
En el caso de los caramelos y perlas de verano de Ricola, el ingrediente añadido corresponde a frutas con un inconfundible aporte de frescor y un agradable sabor del todo apetecible cuando las altas temperaturas aprietan.
De entre los sabores frutales de Ricola para el verano destacan los caramelos de arándano rojo, que destacan por su fascinante deleite en boca. Procedente de Norteamérica, el arándano en su punto maduro e intenso rojo, es una rica fuente de Vitamina C, betacaroteno y sustancias minerales.
Los caramelos de limón melisa y menta montaña se suman a la versión más estival de Ricola. En los primeros, se matiza un intenso sabor cítrico y agradable aroma gracias a esta hierba de la zona oriental del Mediterráneo, muy preciada. En los segundos, la mentha suaveolens, más conocida como mastranzo, deriva en una combinación del sabor a menta y un aroma dulce y duradero.
En los caramelos en versión goma, conocidos como las perlas de Ricola, también está disponible el sabor limón melisa. En este formato, destacan las perlas de fresa, de intenso sabor.