La bodega boutique Cruz de Alba amplía su gama de vinos con el lanzamiento de Cruz de Alba Reserva. Un tempranillo elegante y sedoso, de corte moderno. Equilibrado y complejo, representa la esencia de un nuevo estilo en la Ribera del Duero.
Cruz de Alba Reserva, procede de la zona más arenosa del viñedo Finca Los Hoyales. Su enólogo Sergio Ávila, quien considera la enología “un estilo de vida” más que una mera profesión, ha concebido y desarrollado este nuevo vino en el máximo respeto a la naturaleza con el objetivo de conseguir la auténtica expresión del terroir junto con las más modernas técnicas enológicas, en línea con la filosofía de la bodega Cruz de Alba. Es así como, además de su rigurosa labor en bodega, Sergio cuida y desarrolla los viñedos a través de los principios de la agricultura biodinámica, para intervenir las plantas solo cuando lo necesitan, además de nutrirlas y protegerlas con preparados agrohomeopáticos 100% naturales.
El resultado es un vino complejo pero a la vez delicado, afrutado y largo en boca, que marida excelentemente con sabores definidos como los de la caza, pescados grasos, trufa, regaliz, alcachofas y hasta con chocolate, ya que el cacao según comenta Sergio, exalta su sabor.
La añada 2012 es la primera vinificada bajo esta etiqueta: “las condiciones fueron ideales. Una primavera lluviosa y un verano seco, temperaturas otoñales y humedad correctas han sido los factores que han determinado una maduración perfecta de la uva. Ahí es cuando lo vi claro: teníamos que convertir esa magnífica fruta en un nuevo proyecto. Así nació Cruz de Alba Reserva” comenta Sergio Ávila.
Después de un proceso de fermentación a temperaturas controladas, este tempranillo ha permanecido 20 meses en barricas de roble francés, empleando el sistema de tercios: un tercio de su crianza en barrica se realizó en barricas nuevas, un tercio en barricas de un solo uso, y un tercio en barricas de dos usos. Posteriormente ha permanecido durante varios meses descansando en la botella, antes de salir al mercado en Febrero 2018, con una producción limitada de 6000 botellas.
Un nuevo y emocionante proyecto para la bodega Cruz de Alba, que ha inaugurado el año con dos galardones en el Mundial de Tempranillo 2018: el máximo reconocimiento del concurso, la Medalla Gran Oro para “Finca Los Hoyales 2014”, el vino icono de la bodega, y la Medalla de Oro para el “Cruz de Alba Crianza 2014”.