Desde el principio de su actividad en los años 70, cuando Jean Hervé se lanzó a la elaboración de preparaciones a base de frutos secos, su preferido siempre ha sido el sésamo.Así es como, después de restaurar una antigua almazara, empezó a elaborar sus primeros aceites biológicos y fue concibiendo recetas variadas con la misma ambición.
Desde entonces, Jean Hervé convierte el sésamo en su materia prima predilecta, que le inspira un sinfín de recetas: purés (tahini, de sésamo blanco, de sésamo negro, sésamo semi-integral), “confitados” o purés aromatizados (sésamo con azúcar de caña integral) y también condimentos (gomasio o gomasio del mar).
Con maestría y saber-hacer, Jean Hervé selecciona el mejor sésamo y, para transformarlo, sigue técnicas artesanales de fabricación que son la marca de la casa: el tostado al fuego de leña y la molienda con muela de piedra.
Con sus conocimientos únicos, el especialista en frutos secos bio garantiza la preservación del aroma y las calidades nutricionales del sésamo.
Cargado de nutrientes, el sésamo contiene magnesio, calcio y fosforo. Además, el hierro que contiene asociado con el calcio, es fácilmente asimilable por todos.
Beneficiosa nutricionalmente y de alta cualidad biológica (AB) es el ingrediente ideal de nuestras recetas dulces o saladas para reemplazar las materias grasas y proteínas de origen animal. Asimismo, la crema de sésamo negro se distingue por su alto contenido en cobre (1,6 mg/100 g, es decir 158% de las cantidades diarias recomendadas), necesario para la fabricación de numerosos enzimas y tejidos conjuntivos; y en calcio (886 mg / 100 g es decir 111% de las cantidades diarias recomendadas), mineral imprescindible en cualquier etapa de la vida.
Delicada y que se funde en la boca, desvela un sabor que envuelve el paladar: ligeramente amarga al principio, después aparece la redondez y finaliza con un sabor casi dulce que la diferencia de la crema de sésamo blanco (tahini).A la vista, también es inesperada por su color negro, que crea la sorpresa en los platos, e inspira juegos de asociación de colores y sabores que enriquecerán nuestras comidas.
