Inmersos como estamos en una época de recuperación y evolución de las tradiciones, el anís se posiciona como una de las bebidas a tener en cuenta en esta nueva era para tomar solo, en todo tipo de cócteles o con los cafés de origen y de especialidad, que cada vez cuentan con una mayor presencia tanto en hostelería como en retail. Con el fin de cubrir las demandas del público actual, que opta por sabores más potentes y destilados más complejos, la icónica firma Marie Brizard presenta un nuevo anís de corte clásico, de calidad premium y con una graduación superior a la de su Anisette Marie Brizard, estandarte de la casa.
Fundada a medados del siglo XVIII en Burdeos por Marie Brizard, la primera mujer licorista de Francia, Marie Brizard es una firma pionera y visionaria (entre otros hitos, creó el primer licor de naranja de la historia, Finesse Orange). En la actualidad, la empresa cuenta con un amplio porfolio de más 80 referencias entre licores, esencias, siropes, cremas y shots, que han sido galardonadas con los premios más importantes del sector a nivel internacional, se distribuyen en cerca de 150 países y se distinguen por el uso de los mejores y más especiales botánicos (en total, manejan más de 400) procedentes de todas partes del mundo. Aunque sin duda alguna, su producto estrella ha sido desde sus inicios el Anisette Marie Brizard, que hace unos años renovó su imagen y su botella demostrando su plena salud y su carácter actual.
Con el expertise de más de 250 años en la producción del anisete, nace ahora Anís Marie Brizard 35O, un anís clásico pero muy singular ya que está elaborado con anís verde del Mediterráneo y con una variada selección de plantas y especias naturales que lo convierten el único anís del mercado hecho con 11 botánicos diferentes. Cada uno de estos botánicos se destila dos veces por separado en alambiques de cobre de más de 60 años de antigüedad, dando como resultado un producto con unas características organolépticas únicas. Además, el agua utilizada procede de un manantial propio situado a más de 120 metros de profundidad que permite obtener un agua bruta de excelente calidad, la cual se procede a desmineralizar obteniendo un agua pura transparente, translúcida y sin minerales que puedan afectar el sabor o el color del producto.
Con todo, Marie Brizard 35O presenta una gran personalidad, marcada por el característico aroma y la frescura del anís verde que contrasta equilibradamente con la fuerza del alcohol. En boca es suave, ligeramente dulce y con un largo posgusto. Es ideal para tomar solo, con hielo (disfrutando así de su particular sabor y aroma), con un chorrito de agua para obtener la clásica Palomita, en todo tipo de cócteles (y en especial con vodka, dada su fuerte personalidad y presencia) o con café, aportando un delicioso toque al mítico Carajillo.